“¿LA COMISIÓN NACIONAL DE LOS DERECHOS HUMANOS CONTINÚA SIENDO UN ORGANISMO CONFIABLE ANTE LA SOCIEDAD?”

A lo largo de la historia, el hombre a luchado porque su dignidad humana sea respetada, que los derechos más elementales como la vida, la integridad, la libertad, la igualdad, la seguridad jurídica, la propiedad, entre otras, sean hechos valer en una comunidad de individuos libres, es por ello que el Constituyente de 1917 plasmó estas prerrogativas en la Carta Magna, teniendo como antecedentes los Sentimientos de la Nación, del Ilustre Michoacano JOSÉ MARIA MORELOS Y PAVON. Desgraciadamente, en nuestro país, así como en el resto del mundo, la violación a los Derechos Humanos continua vigente y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, es cada vez mas frágil y tendenciosa hacia los intereses de ciertas personas. En este sentido, se analizaron las Garantías Individuales, refiriéndonos a ellas como una relación jurídica de supra a subordinación que se establece entre el gobernado como sujeto activo por una parte; y el Estado y sus autoridades como sujeto pasivo por la otra; en razón de la cual se da para el primero el derecho de exigir de los segundos una obligación que puede ser positiva o negativa, y que consiste en respetar las prerrogativas fundamentales de que el hombre tiene derecho a disfrutar para el desenvolvimiento de su personalidad. Asimismo, encontramos que los Derechos Humanos son el conjunto de prerrogativas inherentes a la naturaleza de la persona, cuya realización efectiva resulta indispensable para el desarrollo integral del individuo que vive en una sociedad jurídicamente organizada. Estos derechos, establecidos en la Constitución y en las leyes, deben ser reconocidos y garantizados por el Estado. Todos estamos obligados a respetar los Derechos Humanos de las demás personas. Sin embargo, según el mandato constitucional, quienes tienen mayor responsabilidad en este sentido son las autoridades gubernamentales, es decir, los hombres y mujeres que ejercen la función de servidores públicos